viernes, 4 de diciembre de 2009

TEMA 10: LA AGRESIÓN

DEFINICION.
La agresión es la conducta movida por el deseo de causar daño o dolor a las personas, los grupos y la propiedad.

CAUSAS DE LA AGRESIÓN
Se debe a la frustración y la privación.

La Agresión En El Hombre
La agresividad humana es el
producto de un instinto alimentado por una energía biológica e inagotable que en muchas ocasiones no necesitaba de un estímulo externo para que se produjera una reacción violenta, sino que esta reacción podría producirse en la medida que hubiere suficiente acumulación de esa energía biológica, sin la necesidad de la presencia de un estímulo externo.

El hombre dice Freud, citado por Morris y Bigge (1989), crea los
partidos políticos para hallar estímulos que le hagan soltar la energía acumulada, y no son los partidos políticos para hallar estímulos que le hagan soltar la energía acumulada, y no son los partidos políticos la causa de la agresión, pero en los casos en que no puede hallarse ni producir el estímulo externo, la energía del impulso agresivo acumulado es tan grande que reventará y se aplicará in vacuo, o sea sin estimulación externa demostrable.

La actividad en el vacío, realizada sin objeto, manifiesta una semejanza verdaderamente fotográfica con el funcionamiento normal de las acciones motoras de que se trate. Esto demuestra que las pautas de coordinación motora de la norma de comportamiento instintivo son determinadas por herencia hasta en los menores detalles.

Considera Freud que la agresión en el hombre adulto es el
producto de un impulso interno que podía desencadenarse independientemente de que existiera o no un estímulo externo, capaz de provocar dicha conducta. En otras palabras nos dice que ese impulso o excitación interna es consustancial, es decir, independiente del estímulo.

La otra tesis que plantea el mencionado autor sobre la conducta agresiva, está relacionada con la conservación de la especie, la supervivencia del individuo y la preservación de la vida. Esta tesis sustentada en base a un mal que hemos heredado de nuestros antepasados, a través del tiempo y que se remonta al primer período de la edad de piedra, o a la aparición del Homo-Sapiens sobre la tierra hace más de 40 a 50 mil años A.C. por encima de todo nos dice, es más que probable el que la intensidad destructora del impulso agresivo, todavía un mal hereditario de la humanidad, sea la consecuencia de un proceso de selección intraespecífica que operó en nuestros antepasados durante unos cuarenta mil años aproximadamente, o sea el primer período de la edad de piedra.

Sobre lo expuesto encontramos un punto de coincidencia en los que Fromm denomina el modelo hidráulico; es decir, en que la agresión humana se origina igualmente que la
presión del agua o del vapor cuando están dentro de un recipiente herméticamente cerrado y sometido a un intenso calor.

El conductivismo y el
concepto de agresividad
Después de haber expuesto las teorías de los instintivistas, sobre el comportamiento agresivo en el ser humano, vamos a pasar a otros enfoques y tesis sobre el estudio de la conducta agresiva y que tiene base la experimentación, el razonamiento objetivo y mecanicista; es decir, un estudio hecho sobre la base de la ciencia, y al ingeniería del comportamiento.

Los conductistas tienen un concepto diferente de la conducta agresiva que los instintivistas Freud y Lorenz. Ellos manifiestan que la agresión, como cualquier tipo de comportamiento se aprende simplemente sobre la base de buscar la ventaja óptima posible para uno.

A Buss, (1961) señala, que los más importantes comportamientos agresivos es, ante todo la
naturaleza de las consecuencias reforzadoras que afectan al acaecimiento y la fuerza de las reacciones agresivas, es decir, lo que importa es saber qué clase de reforzadores afecta al comportamiento agresivo.

Por otro lado B.
Skinner (1961), como los demás partidarios del conductismo, afirman que su método de estudio es científico porque no tratan de lo visible, o sea el comportamiento declarado, para los conductistas, la conducta agresiva es producto de un aprendizaje previo que ocurre a través del condicionamiento operante y mediante el reforzamiento positivo.

Skinner, por ejemplo manifiesta que la respuesta de una conducta se debe al
control de dicha conducta por medio de un condicionamiento operante, del mismo modo la respuesta agresiva se logra a través de un reforzador o de un estímulo que lo refuerza para Skinner un reforzador no es nada más que un estímulo que se refuerza; es decir, fortalece una respuesta a un estímulo reforzador es la conducta agresiva, y si queremos mantener esa respuesta simplemente reforzamos positivamente dicha conducta y tendremos un individuo agresivo u hostil frente a su ambiente, hasta que eliminemos el reforzador positivo.

Según Skinner, la
conducta humana en general incluyendo la violenta está condicionada a otros reforzadores que él denomina reforzadores secundarios y generalizados. Estos reforzadores desarrollan su poder reforzante, cuando se presentan o se aplican junto al reforzador original; sin embargo, para que esto suceda, el estímulo discriminativo es para algunas respuestas.

Para comprender mejor la relación entre
el aprendizaje previo y la conducta agresiva tendríamos que preguntarnos: ¿porque la gente se comporta agresivamente? según el condicionamiento operante, un individuo se comporta agresivamente, porque ha tenido un aprendizaje previo en algún momento de su vida o cuando se era pequeño que es cuando se empieza a moldear la personalidad del niño.

Encontramos en muchas ocasiones a niños que son estimulados conscientes o inconscientemente por adultos proyectándole a los mismos conductas violentas. Esta situación la encontramos con mucha frecuencia en el medio familiar y social; en los
medios de comunicación fundamentalmente la televisión se observan con mucha frecuencia programas de mucha violencia que los niños perciben y repiten en su medio social.

En muchas ocasiones el medio familiar es hostil, se le castiga y se trata al niño con violencia, produciéndose un condicionamiento operante, mediante un esfuerzo que a su vez fortalece la conducta violenta, según los conductistas, la respuesta a un estímulo reforzador es la conducta agresiva; u sí deseamos mantener esa respuesta, simplemente reforzamos positivamente dicha conducta y tendremos un individuo violento hasta eliminar el reforzador positivo.

La Neurofisiología y el comportamiento agresivo
Los estudiosos de la neurofisiología manifiestan que el comportamiento agresivo es el producto de las estimulaciones que se producen en los diferentes
sistemas y zonas subcorticales del cerebro humano.
Ellos han demostrado que las reacciones afectivas de la rabia y su correspondiente formas de conductas violenta se ha debido a la activación por estimulación eléctrica directa de diversas regiones como las amígdalas, la parte lateral del hipotálamo o alguna parte del mesoencéfalo y la materia gris central; y puede enhibirse estimulando otras
estructuras como el tabique, la circunvolución del cígulo y el núcleo caudal. Por otro lado, la implementación de electrodos de bajo voltaje en alguna parte del cerebro humano permitió cambios significativos en el comportamiento.

W. Hess J. y J. Delgado, consiguieron demostrar que el comportamiento violento se origina de la estimulación eléctrica directa cierta parte del cerebro, y la inhibición de la agresión al estimular otras zonas.

Ello pudieron medir la actividad eléctrica de diversas partes del cerebro cuando los estímulos ambientales suscitaban
emociones como la rabia, el miedo, el placer, etc. También pudieron observar los efectos permanentes producidos por la destrucción de ciertas partes del cerebro, llevado a cabo por experimentos realizados tanto a animales como a humanos.

J. Delgado (1969), señala que:
...el aumento relativamente pequeño en la carga eléctrica de un electrodo implantado en no de los subestratos neurales de la agresión puede producir un súbito acceso de rabia incontrolada y asesina, a igual que como la reducción de la estimulación eléctrica o la estimulación de un centro inhibidor de la agresión puede detener esa agresión de un modo menos súbito.

Aunque Erich Homm tiene un enfoque diferente de lo que es la conducta agresiva; no deja de mencionar a los investigadores de la neurofisiología J.P. Scott y a Leonar Berkowitz, uno de ellos Scott que según Fromm hace alusión a que si una persona no está expuesta a la estimulación para el combate no sufrirá daños fisiológicos o nerviosos, porque nunca pelea. Por otra parte Brkowitz (1967) habla de un esquema de conexiones eléctricas de un estar siempre preparado para reaccionar agresivamente a ciertos estímulos, y no de energía agresiva que pueda transmitirse genéticamente.
A este respecto nos dice Erich Fromm (1980) que los
datos que nos proporcionan los neurocientíficos, contribuyen a aclarar el concepto de un tipo de agresión conservadora de la vida, biológicamente adaptativa y defensiva, más adelante manifiesta que dichas teorías nos han sido útiles porque han podido demostrar que el hombre está dotado de una agresión potencial que se moviliza ante las amenazas a su interés vital.

Pero sin embargo, alude que ninguno de estos datos proporcionado por los neurofisiólogos está relacionado con la forma de agresión que caracteriza al hombre y que no comparte con otros
mamíferos; su propensión a matar y torturar a otros sin ninguna razón, como un fin en sí un objetivo que se persigue no para defender la vida, sino deseable y placentero en si.

5. Agresión En La Mujer
Las mujeres son sensibles a las agresiones y la mayoría de las veces son ellas las agredidas, pues el
sexo opuesto las somete a su voluntad.

Ante la agresión la
mujer es capaz de emitir respuestas agresivas y se encuentran en una actitud defensiva constante, porque percibe el medio externo muy hostil y peligroso.

Sus agresiones generalmente son abiertas y de tipo verbal, aunque tampoco son menos frecuentes las agresiones físicas, pues siempre se siente en peligro y pierde el
control.

En algunos casos, hay también dificultad para responder a las agresiones del exterior, esta incapacidad también favorece las respuestas explosivas, una vez que la carga de agresión hacia algo o alguien se ha acumulado.
Esta situación en
la mujer se debe quizás a la forma en que es educada en el hogar.

6. Diferentes tipos de violencia
Evidentemente la violencia está presente en la vida real; es un hecho que no podemos soslayar. Se encuentra a nuestro lado; muchas veces en casa del vecino. Cada día hay seres humanos que son asesinados, torturados o maltratados. No podemos actuar delante de nuestros hijos como si la violencia no existiera, pues, en cualquier caso. Ellos siempre acaban descubriendo que la violencia existe realmente. Esto no significa, sin embargo, que tengamos que poner delante de sus ojos las más crudas imágenes de violencia, dejándolos solos frente a ellas.

La búsqueda de la violencia como diversión ha sido emprendida de manera especial en los
Estados Unidos de Norteamérica. La cuestión que divide a los investigadores es la de saber si la violencia como diversión o distracción provoca o, por el contrario, disminuye la agresividad. Una escuela de psicología afirma que los individuos se vuelven menos agresivos después de haber visto, oído y leído relatos de violencia en los medios de comunicación (teoría de la catarsis). La escuela opuesta sostiene, en cambio, que los individuos se vuelven más agresivos después de tales relatos de violencia (teoría de la agresividad, de la estimulación o de la excitación). Actualmente, la mayor parte de los científicos, psicólogos, sociólogos, criminólogos, educadores aceptan como válida la segunda teoría.

La violencia puede ser presentada como justa y buena y también puede serlo como injusta y mala. Todo depende de las motivaciones que lleven a cometer actos de violencia.

La violencia, ¿ha sido practicada por los buenos o por los malos? Dicho de otro modo: ¿Qué se pretende? ¿Que la violencia sea aprobada o rechazada por los espectadores o lectores? Un investigador se dedicó a contar el número de muertes producidas por los buenos y los malos, en las películas autorizadas para su exhibición durante un período de
tiempo determinado y pudo constatar que los buenos habían matado a más personas que sus malvados adversarios.
Es necesario preguntarse qué criterios se aplican para definir el bien y el mal ¿Quién es el bueno, y quien el malo? Es el indio o el vaquero.

Los niños desfavorecidos: blanco principal
Se puede dividir al público en tres categorías, según el nivel de madurez real de los individuos.
Los niños y
adolescentes con problemas aprecian más las películas de violencia y sobre todos las de una violencia más cruel y brutal, que los muchachos y muchachas estables y equilibrados.
Podemos ir todavía más lejos. Son precisamente los chicos que tienen poco contacto con su padre u otro hombre adulto, los que muy a menudo encuentran en los héroes de los telefilmes la imagen del padre, y un ídolo a quien admirar y a quien parecerse. Se ha comprobado también que, los jovencitos más inclinados a contemplar espectáculos violentos en la televisión, son aquellos que de algún modo se ven menos favorecidos desde el punto de vista social y que ya tienen tendencia a ser más agresivos que el promedio.

Para estos pequeños que inician la vida de modo poco favorable, la
televisión es la escuela de la vida. La pequeña pantalla es su principal fuente de información sobre la manera de comportarse con los demás y de enfrentar sus propias dificultades. Ver anexo 4
Con frecuencia la televisión sugiere a los menores que la violencia es un medio para resolver los
problemas. Además, en los medios de comunicación, la violencia da buenos resultados.

Ver Anexo 5
Los niños y adolescentes inestables y desfavorecidos son los que más aprecian la violencia, y los que también se dejan
Influenciar en mayor grado por la que contemplan.
Desde luego que, los niños que se sienten solos, que están convencidos de que nadie se interesa por lo que ellos dicen y que carecen de confianza, están más marcados por la violencia que los que mantienen unas relaciones afectuosas y armónicas con sus padres con quienes pueden hablar prácticamente de todo, y con el resto de la gente.
Los efectos de la violencia

Desde que se llevan a cabo
investigaciones sobre las cuestión, la opinión mayoritaria viene oscilando entre el hecho de que una confrontación permanente con violencia en la pantalla constituye un peligro y la constatación de que dicha confrontación puede suponer una descarga de las tendencias agresivas del espectador.

Este
debate no es de hoy ni de ayer, pues refleja en muchos aspectos el conflicto entre Platón, que consideraba las piezas macabras como peligrosas para los espectadores y Aristóteles, apoyado mucho más tarde por la teoría de la ab-reacción de Freud, quien sostenía que tales experiencias podían constituir una catarsis, un medio de embarazarse por poderes de los sentimientos inhibidos o que no conviene manifestar.

Sin embargo, después de numerosos estudios, investigadores de renombre han publicado sus conclusiones, según las cuales se confirma la teoría de la agresividad. Uno de los principales defensores de esta tesis es el doctor Suymour Fleshbach, quien se ha ido convenciendo progresivamente, a través de sus propias investigaciones, del
carácter nefasto de la violencia en la televisión. Ver anexo 6

Conclusiones y recomendaciones
El estudio realizado permite formular las siguientes conclusiones:
1. La violencia existe y ha existido en la mayoría de las culturas, tanto en la realidad como reproducida o incorporada.2. Suprimir la violencia de modo completo en los medios de comunicación ni es razonable ni deseable.3. La agresión humana es el producto de un impulso interno que podía desencadenarse independientemente de que existiera ono un estímulo externo, capaz de provocar dicha conducta.4. La personalidad puede variar de acuerdo al modelo cultural común a la sociedad a que se refiera; sin embargo, existe una unidad psíquica de la humanidad.5. El sadismo corresponde a un componente agresivo del instinto sexual independizado y exagerado, y por desplazamiento usurpador de la posición principal
Después de haber emitido las conclusiones, presentamos las siguientes recomendaciones:
2. Es necesario que padres de
familia y educadores comprendan la magnitud de la agresión, ya que un niño agredido, cuando sea adulto será agresor.2. La agresión en el ser humano se debe a un impulso motivado por un estimulo externo, pero se debe enseñar a controlarlo.3. Es necesario que los hogares controlen los programas que pueden ver sus hijos, ya que la mayoría de ellos están cargados de violencia y odio.4. Se deben cultivar los valores, practicarlos, para que el niño de hoy que será el hombre del mañana no sea agresivo y no cultive la violencia dentro de su personalidad.5. Es necesario que se deje comercializar la violencia y agresión a través de programas y videojuegos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario